24 febrero 2010

Carta a Asier Abaunza

Estimado Sr. Abaunza

Nos vemos, una vez más, en la obligación de ponernos en contacto con usted tras las constantes incidencias ocurridas en la línea A.3 de Bilbobus

Pese a las promesas de puntualidad y cumplimiento de horarios por parte del Ayuntamiento, durante las últimas semanas la línea acumula constantes retrasos. Los retrasos en los medios de transporte público siempre son incómodos, y si éstos son esporádicos, los usuarios deben tener cierta tolerancia y comprensión con los mismos, pero en este particular es necesario resaltar que, no son esporádicos y, como bien saben, la Línea A3 que da servicio a Olabeaga dispone de UN UNICO AUTOBUS, con lo que cualquier incidencia y/o retraso deja al barrio y por ende, a los usuarios sin alternativas.

Y esta circunstancia no es nueva, llevamos tiempo poniendo en conocimiento del Ayuntamiento los problemas de la línea. En esos términos el pasado junio presentamos un escrito en el que se recogía el sentir del barrio plasmado en las numerosas firmas que se adjuntaron al mismo, y en el que se solicitaba la mejora cuantitativa y cualitativa del servicio. Esto propició que el 8 de julio visitara el barrio para hacerse eco de nuestras denuncias y que, posteriormente, el 25 de noviembre nos reuniéramos en el Ayuntamiento.

En todas las reuniones la misma dinámica. Ante las peticiones del barrio, el Ayuntamiento alega que no dispone de medios para la mejora cuantitativa del servicio, que estudiará la posibilidad de un refuerzo en horas punta que no acaba de concretarse y se compromete al estricto cumplimiento del horario. Pero, en la práctica, los retrasos continúan y empiezan a producirse tensiones entre los choferes y los usuarios.

Resaltar el particular desamparo que sufren las personas con discapacidad física usuarias de esta línea, dado que la plataforma/rampa de acceso que les permite acceder al autobús por sus medios no funciona en más ocasiones de las que lo hace correctamente, quedando a expensas de la buena voluntad del chofer o de alguno de los usuarios para que les ayuden a acceder al autobús.

Además puntualizar, que consideramos que decisiones como el cambio de parada del Sagrado Corazón a la Gran Vía (esq. Plaza Basterra) no deben ser tomadas unilateralmente por este Ayuntamiento, y deben tener en cuenta la opinión del barrio, planteándose alternativas y plazo de alegaciones para los afectados, consensuando e implicando a los vecinos, dando oportunidad de funcionar a la tan mentada y poco utilizada colaboración ciudadana, y en estos términos se acordó en la reunión del pasado 25 de noviembre.

En otro orden de cosas, hacerle llegar nuestro descontento, por la falta de información que sufre el barrio. El pasado domingo, con motivo de la celebración de la Bilbao-Bilbao, muchos vecinos del barrio no pudieron salir-entrar del mismo hasta la finalización de la misma. No es plato de buen gusto que el barrio quede incomunicado, pero comprensible desde el prisma de que somos ciudadanos de Bilbao (probablemente de segunda) y debemos ser solidarios con las actividades de la Villa, pero lo que es intolerable en todo caso es la desinformación relativa a esa incomunicación. Y este es un ejemplo, pero como este, tantos otros.

En conclusión, de nada sirven las buenas intenciones y las reuniones cargadas de buenas palabras, si estas no se concretan en mejora del servicio, o al menos en la mejora de la calidad en el servicio existente. No sirve de nada que se dé un servicio puntual y de calidad en el 70% del horario si en las horas punta, en las que es necesario un buen servicio para que los usuarios puedan volver al mediodía a sus casas, o llegar puntuales a su lugar de trabajo o sus compromisos, el horario no se cumple. Y en este sentido, no vemos ningún tipo de avance y de ninguna de las maneras se está cumpliendo con lo que se acordó en esas reuniones.

Creemos que hemos depositado en usted nuestra confianza pero no vemos respuestas, y solo es cuestión de tiempo que nos planteemos otras alternativas.

Atentamente.
Olabeaga Bizirik
17 de febrero de 2010

22 febrero 2010

Olabega no tiene ratio

No tenemos ratio ni para ser informados

En Olabeaga hemos descubierto que la palabra clave en las instituciones es ‘ratio’. Según la Real Academia de la Lengua, ratio es razón. Mira tú. Sin embargo, este término, en su concepción matemática supone la «Diferencia constante entre dos términos consecutivos de una progresión aritmética». Esta debe ser la acepción que utilizan nuestras instituciones para argumentarnos constantemente que Olabeaga no tiene ‘ratio’.

Por ejemplo, no tenemos ‘ratio’ para mejorar el servicio de autobús. Esto es, no somos el número de personas ‘suficientes’ para que se amplíe. Tampoco tenemos ‘ratio’ para que se considere que la alternativa al Scalextric de Sabino Arana se traslade a Olabeaga. Y tampoco para que la planificación de servicios como el tranvía o el metro, llegue hasta nuestras calles. De nuevo, no somos suficientes.
Estos hechos son más que discutibles, dado que más que cuántos somos debiera primar cómo vamos a vivir cuando las instituciones acaben de dilapidar el territorio noruego tal cual vándalos de siglos pasados.

Pero la gota que colma el vaso es que tampoco tengamos ‘ratio’ para ser informados. Desde esta Plataforma, que lleva seis años defendiéndose de las instituciones para velar por los derechos del barrio, hemos pedido por todos los medios que las obras que nos acechan estén lo suficientemente bien indicadas para que el personal sepa a lo que atenerse cuando corten un vial, quiten un paso peatonal o no nos dejen dormir por la noche.

Hace unas semanas la Diputación Foral de Bizkaia y Bilbao Ría 2000, han comenzado a trabajar en la segunda fase de los accesos a San Mamés, en el entorno del edificio Bami, eliminando el acceso peatonal que discurre entre la Campa Makala y dicho edificio y uno de los pasos que utiliza la gente para subir al centro de salud. (Nos pasaron a Basurto porque no teníamos ‘ratio’, se nos había olvidado). El caso es que la única indicación al respecto la han colocado en el mismo acceso a la cuesta. Genial, usted que vive en la Ermita, Pénjamo, las casas de al lado del parque, el dique… decide que va al médico por ahí y cuando llega está cortado. Ante la solicitud de que este tipo de indicaciones tienen que estar por todo el barrio nos dicen que «por ahí pasa poca gente y que es suficiente», lo que traducido significa que ‘no tenéis ratio para tantos carteles’. ¡El colmo, vamos!

A la vista de todo esto, tenemos que pensar que dada la densidad de población de barrios como Santutxu tienen que estar encantados. Vivirán apretujados, pero llenos de servicios y en palmitas por parte de las instituciones… ¿o no?

Plataforma Olabeaga Bizirik